Hace 25 años, Adam Wooler, era un estudiante con pocos recursos, que trabajaba de socorrista, en los veranos, en la playa de Whitsand Bay, en Cornwal (Reino Unido), para pagarse los estudios, compró un cobertizo, en lo alto del acantilado, por la cantidad del equivalente a 5000€ actuales, para estar más cerca del trabajo y ahorrarse el alquiler de un apartamento.
Cuando acabó los estudios, estuvo mucho tiempo sin volver por allí, ya que se casó y tuvo hijos, y en aquella destartalada cabaña, de tan solo 27 m2, no cabía la familia completa, y además carecía de todas las comodidades, que en su tiempo de estudiante pasaba por alto.
Pero un día él y su esposa, pensaron que el lugar era bellísimo y que podían reformar la choza, que aunque no servía como vivienda familiar, si podía transformarse en un estupendo apartamento, con unas vistas espectaculares, compuesto de cocina, dormitorio, baño y terraza
Y dicho y hecho, con su proyecto se fueron a un banco a que les dieran un crédito, para dar forma a la nueva vivienda, y lo consiguieron, la han transformado en un apartamento, idílico, para parejas o personas solas, que quieran disfrutar de paz, tranquilidad, silencio y aislamiento, gozando de unas vistas y unos atardeceres espectaculares.
No admiten niños, ni mascotas, y es entendible, porque no hay vallas que protejan, del vacío, que yo aquí sí que veo un fallo, que como te levantes de noche, por ser sonámbulo o desorientado, aterrizas directamente en la playa.
Para aquellos que estén interesados, la alquilan por semanas y el precio oscila entre los 1800 y los 3000€, la semana y ya está reservada, para todo este año.
Han amortizado los 100.000€ que pidieron de crédito, ya que es la cantidad, que anualmente les proporciona su alquiler. Están tan contentos con su idea, que ya están gestionando la compra de otra vieja casa, para transformarla.
La verdad, es que el sitio es espectacular y la cabaña preciosa.
Cuando acabó los estudios, estuvo mucho tiempo sin volver por allí, ya que se casó y tuvo hijos, y en aquella destartalada cabaña, de tan solo 27 m2, no cabía la familia completa, y además carecía de todas las comodidades, que en su tiempo de estudiante pasaba por alto.
Pero un día él y su esposa, pensaron que el lugar era bellísimo y que podían reformar la choza, que aunque no servía como vivienda familiar, si podía transformarse en un estupendo apartamento, con unas vistas espectaculares, compuesto de cocina, dormitorio, baño y terraza
Y dicho y hecho, con su proyecto se fueron a un banco a que les dieran un crédito, para dar forma a la nueva vivienda, y lo consiguieron, la han transformado en un apartamento, idílico, para parejas o personas solas, que quieran disfrutar de paz, tranquilidad, silencio y aislamiento, gozando de unas vistas y unos atardeceres espectaculares.
No admiten niños, ni mascotas, y es entendible, porque no hay vallas que protejan, del vacío, que yo aquí sí que veo un fallo, que como te levantes de noche, por ser sonámbulo o desorientado, aterrizas directamente en la playa.
Para aquellos que estén interesados, la alquilan por semanas y el precio oscila entre los 1800 y los 3000€, la semana y ya está reservada, para todo este año.
Han amortizado los 100.000€ que pidieron de crédito, ya que es la cantidad, que anualmente les proporciona su alquiler. Están tan contentos con su idea, que ya están gestionando la compra de otra vieja casa, para transformarla.
La verdad, es que el sitio es espectacular y la cabaña preciosa.
Es muy bonita, han hecho buen negocio con la casita y el sitio es precioso para ir a veranear.