Chris Murray, es un granjero de Devon, en Inglaterra, que cría patos y hace unos días, una de sus patas, tuvo una camada, de siete patitos.
Cuando los patitos tenía, tres días, salieron a darse un paseo, por la granja y como buenos y bienvenidos hermanitos, se subieron a un tronco, todos juntos, para tomar el sol, de una manera ordena y demostrar los bien educados y lo bien que se llevan.
Pero como en todas las familias, sobre todo si son muy numerosas, siempre hay algún miembro díscolo y que le lleva la contraria a todos los demás, haciendo ostentación de su personalidad diferente, y eso es lo que le ha pasado al séptimo patito (o primero, según por donde se empiece a contar), que decidió que a él eso de las fotos, le importan un pito y que no le da la gana de salir en la foto.
Cuenta el granjero, aunque no hay foto, que lo confirme, que cuando se puso de pie, fue como un efecto dominó y todos terminaron por los suelos.
Díscolo o no díscolo, las fotos son de una ternura impresionante y el patito protagonista, un gamberrete.
Que bien me cae el patito cabron.
La verdad es que hacia tiempo que no veia unas fotos tan tiernas, dan ganas de llevarselos todos a casa, jajajaja. Un beso.
Muy tierno relato. Es maravilloso ver lo que nos presenta la naturaleza.
Un gran abrazo Nela!!
Ja ja ja, no hay manera de sacarle, es un patito "fashion victim" al que no le gustan los papparazzi... pero es tan mono como todos los hermanitos.
Son preciosos los patitos :)
¡Qué ternura! Nela y Mar.Hermoso post. Un abrazo con mucho amor para ambas.
jajaja que divino el patito (:
Gracias por pasar Nela, que tengas un lindo fin de semana.
Besito♥
Si que es preciosa si y bueno la libertad existe para todos ¿no?, un abrazo.
piolin te extraño mucho y ya quiero que vengas atte : walter sebastian salas leos